Trastorno Obsesivo Compulsivo
Se caracteriza por la presencia de obsesiones, compulsiones o ambas.
Obsesiones: son pensamientos, impulsos o imágenes mentales que la persona experimenta como indeseadas. Las personas suelen intentar suprimir estos pensamientos utilizando actos específicos u otros pensamientos diferentes.
Compulsiones: comportamientos o rituales mentales (como rezar) que la persona realiza como respuesta a las obsesiones, y que se realizan de una forma estereotipada. Su objetivo es disminuir la ansiedad ocasionada por las obsesiones, aunque en el caso de los niños no siempre son capaces de relacionar estos comportamientos con un objetivo especifico.
Testimonio clínico: Sebastián tiene 11 años. Su abuelo pasó por una internación reciente por complicaciones de salud que lo asustó mucho. Desde entonces sus padres lo notan preocupado y ven que se pasa horas limpiando su cuarto repetidamente. También notan que tiene dificultades para dormir a la noche, por lo que al día siguiente tiene problemas para prestar atención en el colegio. Cuando finalmente su padre decide hablar con Sebastián, éste comienza a llorar, ya que le avergüenza que sus padres hayan notado su comportamiento. Le explica a su padre que el día anterior a que internaran a su abuelo, éste le había dicho que tenía que ser más ordenado con su habitación, y que él siente que en parte tiene la culpa de la internación por no haberle hecho caso. Desde entonces cada vez que piensa en su abuelo recuerda la imagen del mismo internado y lo único que calma su ansiedad es ordenar su habitación, ya que teme que si no lo hace, lo volverán a internar. Por otro lado, se duerme muy tarde porque cree que si se acuesta sin rezar lo suficiente, algo malo les podría pasar a sus padres también. Aunque Sebastián reconoce que esas ideas no parecen tener sentido, explica que no puede evitarlo, ya que de lo contrario el nerviosismo lo domina.